Fotocuentos

jueves, 14 de julio de 2011

La Adicción más Brutal

(A continuación el primer cuento que escribí)

El sol salía dando la bienvenida al nuevo día, el aire trasportaba pequeñas partículas que aún contenían el olor de lo que Rodrigo necesitaba, cuando estas partículas llegaron a su olfato, las ansias llegaron, Rodrigo ha luchado la última semana por no caer, por no caer en aquello que lo ha  tenido envuelto los últimos 3 años, pero esta última semana no lo ha tenido, no lo ha olido, no ha tenido contacto alguno con ello, pero algunas de las personas que pasan afuera de su habitación si lo tenían y el envidiaba eso, ¿será envidia de la buena?, no lo sé juzguen ustedes.
Rodrigo observa el reloj, y  se da cuenta que en media hora empiezan sus clases universitarias, se levanta, se arregla, mira en su cuaderno cinco materias sino tiene tareas, o trabajos, lo primero que ve es una marca, una marca guardada de lo que necesitaba… realmente estaba desesperado, necesitaba de aquello para salir adelante y poder “sobresalir” en sus clases… ―No!, puedo aguantar― Dice Rodrigo, sabiendo que es mentira, sólo para poder engañar a su yo interior.
Cuando llegó a la U. todo lo llamaba, en su cabeza ya veía como las hormiguitas y hasta el Ché pintado en aquella pared lo incitaban a buscar la dosis diaria para poder seguir viviendo… ―No!, puedo aguantar― Repite Rodrigo, ahora hace lo imposible para poder llegar tarde a su salón de clase, para poder llegar y concentrarse en clase, y no pensar en lo que tanta falta le hace.
Así evadiendo los primeros cinco minutos de clase, y llegar sólo a poner atención y evitar mirar a la persona cerca a la esquina superior del salón, aquella persona que lo inició en lo que ahora quería evitar… él sabía que si miraba… caía… y no podría salir jamás de ese abismo. Así transcurrió la mañana…
La hora del almuerzo  asomó su gran panza, Rodrigo sale con su mejor amigo, a comer colitas pues es barato y queda satisfecho, y evita hablar de eso que estaba sintiendo y le hacía sentir que sucumbía, Jesús sabía cómo se sentía pues Rodrigo le contaba todo a él.
La tarde se avecina, y maman gallo jugando con pedacitos de pasto, recordando como nuestros antepasados, tejían, y como la pachamama es tan sabia, Rodrigo por ese instante, sintió que no necesitaba ya de lo que tanto huía, hasta que pasó esa persona que tanto evitaba, a él le provocaba correr y pedir su dosis, ―No!, puedo aguantar―, esa ya era la frase que el disfrazaba su necesidad.
Entró a clase más tranquilo, pues estaba seguro de que allí no habría nada que lo hiciera pensar en su adicción.
Llegó la noche, ya en su habitación todo le recordaba de nuevo, ya se dio cuenta que ya no era una simple adicción, había perdido la cordura, ya no eran las hormigas, ya no era el Ché, esta vez, era la cobija, la almohada, la pipa que ahora solo era un adorno… todo le decía: ―Anda, Busca, Encuentra, Embriagate― con un grito desesperado, agarra el celular… busca el numero, que por poco borra la semana anterior, pero que de todas maneras se lo sabía de memoria, marca el número, espera, empieza a timbrar, una voz tan hermosa como el canto de los ruiseñores al amanecer dice:
―Aló?
―ehhh, Hola Andrea soy yo…mmmm sólo quería decir que te amo, y que te necesito para subsistir, que te necesito para respirar, necesito de ti, para vivir… volvamos… TE AMO

martes, 5 de julio de 2011

Buen Primer Mes De Vacaciones

Sí es verdad, un mes de "Vacaciones" y falta otro, pero que le vamos a hacer.
Este mes conocí a un gran compañero de la palabra Darwin Caballero de Bogotá, y con él en acto de valentía y atrevimiento montamos juntos una adaptación de Tacirupeca Jaro de Música para el Pie Izquierdo y lo contamos dos veces, una en la hermosa presentación que hubo en el café Casablanca y en la Hermosa Ciudad de Tuluá en los cuentos de Ciudad Lamparilla al que fuimos invitados por Franklyn Tovar y Harry Guerrero, qué bonita  función y qué bonito publico.
Después viendo la necesidad de crear un olectivo que se encargue de abrir nuevos espacios para el buen uso del tiempo libre, con un grupo de amigos creamos el Colectivo cultural Sevicuento y con el se vienen muchas más sorpresas para mi hermosa Sevilla, Cine Bajo las estrellas que el próximo jueves 7 de julio a las 7 y media en la Plaza Principal de Sevilla Valle se proyectará La Vida es Bella de Roberto Benigni. 

Y hoy ya soy parte de la Red Internacional de Cuenta cuentos.. ¿qué más se viene?